viernes, 7 de agosto de 2009

Movies that rock: John Hughes x3

Se acaba de morir (ayer) el director, productor y escritor John Hughes. Puede ser que éste nombre no le diga nada a mucha gente, pero su lista de trabajos como productor, director y escritor es clave en la memoria cinéfila de cualquiera que haya nacido o pasado su infancia durante los 80 y principios de los noventa: Some kind of wonderful, Home alone, Ferris Bueller's day off, Weird Science, (y un montón más, pero esas son mis favoritas)

¡Mentira!
, mis tres películas favoritas de John Hughes se basan también en la presencia de la actriz adolescente más completa y compleja de la historia de las comedias adolescentes: Molly Ringwald. Esta pelirroja combinaba belleza con cercanía, vulnerabilidad con auto compasión y en las siguientes tres películas representa tres personajes tan distintos como sus respectivas clases sociales:

En Sixteen Candles o Se busca novio, de 1984, (seguramente, una de mis películas favoritas de todos los tiempos), la historia se basa en una premisa simple: Samantha cumple 16 años, nadie de su familia se acuerda, y lo único que quiere es pasar lo más piola posible. Sin embargo, le pasa todo lo vergonzoso que le podría pasar gracias a su familia (sus abuelos, el chino, el hermano chico gordo, su hermana loca, etc) y a que, por supuesto, le gusta el chico popular que , por supuesto, anda con la chica popular. Pero lo improbable se impone, y mientras Samantha termina soplando velitas (en un sentido sumamente literal y nada sexual) con Jake (popular), el amigo nerd termina dándose besos con la rucia-ceniza popular. Pura calidad, y aparte, salen los hermanitos Cusack como un par de inadaptados (no les quedaba otra, ya que los dos eran bastante feos).

El club de los cinco, o The breakfast club (1985): La película responsable de definir los estereotipos de los adolescentes de una generación, y que aparte, nos presenta el peor, pero más efectivo make over de la historia (Ally Sheedy se pone un poco de rimmel y enamora al jog Emilio Estevez, adonde la viste). Improbable, pero in-ol-vi-da-ble.
Pretty in pink o La chica de rosa (1986): Aunque no está dirigida por John Hughes (si está escrita por él), es seguramente una de las comedias adolescentes más significativas de la época, a pesar de que personalmente prefiero a las dos primeras. La chica pobre (Molly) se enamora del chico rico (Andrew McCarthey), quien también, contra todo pronóstico, también se enamora de ella, pero sus mundos y sus respectivos prejuicios los separan constantemente. No les cuento el final, pero es emocionante.

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